Sean ustedes bienvenidos estimados lectores, hoy les compartiré un texto referente al mes que vamos terminando, seguramente ustedes han escuchado o sentido cuando una relación llega a su final, cuando todo lo que hacen ya no es suficiente para que la relación se sostenga, bueno hoy les hablare de eso.
Cada uno de nosotros sabemos el momento cuando algo ya no funciona en la relación de pareja, cuando nos quedamos únicamente por seguir obteniendo los beneficios de la relación, la costumbre o bien el simple hecho de no querer dejar a la persona por tener miedo a estar solos, y eso nos vuelve prisioneros de una relación que no tiene nada de amor.
Es ese momento en que todos nos volvemos prisioneros de una relación que lejos de ser de pareja es una prisión llena de conflictos, de aburrimiento, de estrés, de malestares y es cuando uno debe comenzar a pensar, ¿seré lo suficientemente maduro para poder dejar una relación que lejos de hacerme bien me lastima?
Aquí es donde inicia lo interesante, el poder identificar que el amor es una construcción propia, una construcción que se debe a lo que hemos visto en la televisión, en las películas en los libros, pero sobre todo en la pareja que vimos desde que nacimos, aunque parezca que no, el primer modelaje de las relaciones es la de nuestras figuras primarias, llamémosla padres, o bien quien nos cuidara en la infancia.
Claro le debemos muchas de nuestras formas de entender el amor a nuestras figuras primarias, aquellos que nos debieron brindar algo que nadie más podía, pero sobre todo, debemos asumir la responsabilidad de que aunque ellos hicieron lo mejor o peor , depende como lo quieras ver, llega un punto en la vida en la que debes afrontar la responsabilidad y asumir las consecuencias de tus actos, no podemos pasarnos toda la vida culpando a alguien más de nuestras decisiones o errores.
Disculpa, de repente me perdí en el tema, pero bueno regresemos a lo que nos ocupa, si una vez que identificaste que es el amor, lo definiste y das cuenta que no se parece en nada a lo que tienes con tu pareja, y bueno yo diría no esperes tanto tiempo, si desde el noviazgo la persona que tienes enfrente no te trata como quieres o no es la mitad de la persona que juro ser, yo te diría huye, corre, vuela, aléjate, recuerda que mentirte a ti mismo diciendo “mi amor lo va a cambiar”, nunca va a suceder.
La primer cosa que debes hacer para amar a alguien es amarte, porque muchas veces vamos por el mundo diciendo y amando personas y no nos amamos a nosotros mismo, entonces desde ese punto parece que mentimos, como puedo amar a alguien si no me amo, parece que solo queremos recibir los beneficios de ser amado, entonces vamos por la vida aceptando cualquier cosa a la que llamamos amor, o bien lo que en algún momento decía, vamos por la vida jugando un juego que estamos destinados a perder o entregar todo.

El punto aquí es poder identificar, que es lo que sucede en tu relación de pareja, si realmente tienes una relación basada en amor, en la fantasía o identificar en que esta basada tu relación, ya que en la creencia del ideal, todos deberíamos saber que las relaciones de pareja se basan en muchas cosas, y que el amor es un ingrediente importante, pero no es lo único en que se basa una relación.
Identifica todo aquello que hace especial tu relación de pareja, identifica todo lo que buscas en una relación y date cuenta si realmente lo que tienes se asemeja a lo que imaginabas o de plano son cosas muy diferentes, si es así, por favor pregúntate ¿Qué me mantiene en está relación?, ¿Estoy en una relación de pareja o en una prisión?
Te agradezco por leerme, y sobre todo no me puedo despedir sin antes decirte que no creas en la mentira más grande, “voy a cambiar por ti” eso no va a suceder, pero si ya la creíste te invito a que agendes una cita con nosotros, te podremos ayudar a identificar que cosas pasan o suceden en ti para estar en una relación así.
Psic. David Correa Caruzo